16 September 2010

El remordimiento

He cometido el peor de los pecados 
que un hombre puede cometer. No he sido 
feliz. Que los glaciares del olvido 
me arrastren y me pierdan, despiadados. 

Mis padres me engendraron para el juego 
arriesgado y hermoso de la vida, 
para la tierra, el agua, el aire, el fuego. 
Los defraudé. No fui feliz. Cumplida 

no fue su joven voluntad. Mi mente 
se aplicó a las simétricas porfías 
del arte, que entreteje naderías. 

Me legaron valor. No fui valiente. 
No me abandona. Siempre está a mi lado 
La sombra de haber sido un desdichado.





Jorge Luis Borges




Nos ponemos tantas metas ambiciosas, objetivos, deseos inalcanzables o no, deberes, compromisos ineludibles, obligaciones inaplazables... que es difícil acordarse de lo esencial. Atreverse a ser feliz. Menuda chorrada, ¿no? 


Sé que lo he puesto otras veces, pero es una frase genial de una película que me encanta, "Cosas que nunca te dije":


Cuando somos felices  no nos damos cuenta, eso también es injusto. Deberíamos vivir la felicidad intensamente y tendríamos que poderla guardar para que en los momentos en que nos haga falta pudieramos coger un poco, del mismo modo que guardamos cereales en la despensa [...]

Alguien me dijo hace tiempo que lo peor del hombre es el miedo. Este post va para los valientes que se atreven a ser felices, o a intentar serlo.




Saludos.




PD: sí, es un post con recortes de otros... llamémosle pereza ^_^!

01 September 2010

Arcoiris

A veces
por supuesto
usted sonríe
y no importa lo linda
o lo fea
lo vieja
o lo joven
lo mucho
o lo poco
que usted realmente
sea

sonríe
cual si fuese
una revelación
y su sonrisa anula
todas las anteriores
caducan al instante
sus rostros como máscaras
sus ojos duros
frágiles
como espejos en óvalo
su boca de morder
su mentón de capricho
sus pómulos fragantes
sus párpados
su miedo

sonríe
y usted nace
asume el mundo
mira
sin mirar
indefensa
desnuda
transparente

y a lo mejor
si la sonrisa viene
de muy
de muy adentro
usted puede llorar
sencillamente
sin desgarrarse
sin deseperarse
sin convocar la muerte
ni sentirse vacía

llorar
sólo llorar

entonces su sonrisa
si todavia existe
se vuelve un arco iris.


Arcoiris - Mario Benedetti



Simple vapor de agua visto a través de los rayos del Sol. No es más que eso. Como lágrimas iluminadas por una sonrisa. Y no puedes explicar su belleza. No son sólo los colores, o la forma, o lo imprevisto, o lo efímero... Es lo privilegiado que te sientes al poder contemplarlo. Como si toda esa pirotecnia silenciosa se haya materializado ante tí, sólo para tí. Tan tuya y tan de nadie. Tan palpable y tan inalcanzable. Tan propia como ajena.



Saludos.